Hoy he soñado que te perdonaba.
Tú aparecías,
neblinoso como aquella vez.
Ya no había nada.
Me hablabas,
yo te hablaba,
y no te lo he dicho, pero te perdoné.
He despertado a medio sueño.
Aparecía, sólida de todo,
regresada a la vida otra vez,
y no te he perdonado,
no perdonaré.
No hay comentarios:
Publicar un comentario