miércoles, 6 de marzo de 2024

Los dones

Me han dejado algunos regalos mis traumas

a consecuencia de haberlos sobrevivido:

tengo

un miedo cerval a desaprovechar mis días

y que se me pase así la vida, puf;


compruebo cuando duermen

que los que quiero aún respiran,

por si en una exhalación se funden y yo ya he llegado tarde;


lloro mucho, amo mucho,


a veces me acuerdo de unas manos que no quería

encima de mi cuerpo,

de una insistencia por abrirme

a pesar de mi llanto.

Me han robado por tantas veces mi deseo.


También tengo

que hacerme muy valiente para decirte a la cara lo que pienso,

y nunca quiero hacerte daño,

incluso cuando querría, no quiero.


Tengo los ojos puestos

en el ayer y en el mañana

en un mismo parpadeo;

tengo ojeras, ansiedad,

pinchazos en el pecho y en el cuello,

digestiones tristes, en silencio,

que revientan en exabruptos violentos;


necesitarte cerca,

tratar de ahorrarte el duelo

(distancia de seguridad: lejos);


volverme hacia ti, cerrarme en mí

y llorar una vez más

porque es un recuerdo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario